La demencia frontotemporal (DFT) a veces se denomina “demencia del lóbulo frontal”. Afecta las partes del cerebro detrás de la frente y provoca cambios en el comportamiento, dificultades lingüísticas o incapacidad para comprender palabras o reconocer rostros y objetos familiares. A diferencia de la enfermedad de Alzheimer, la demencia frontotemporal normalmente no afecta la memoria ni la orientación en el mismo grado. En cambio, los síntomas más notables pueden ser cambios en el comportamiento o la personalidad y dificultad con el habla y el lenguaje.
La demencia frontotemporal puede ser hereditaria y, a menudo, se desarrolla a una edad más temprana (entre los 55 y los 65 años) que otras formas de demencia.
Los especialistas certificados del Norton Neuroscience Institute Memory Center están a la vanguardia de los avances en la atención de personas con demencia frontotemporal.
Más pacientes en Louisville y el sur de Indiana confían en el Norton Neuroscience Institute para su atención neurológica que en cualquier otro proveedor de la zona. Los pacientes encuentran una amplia gama de especialistas certificados que brindan diversos puntos de vista para desarrollar un plan de atención personalizado para cada paciente.
La variante conductual de la demencia frontotemporal da como resultado cambios marcados en el comportamiento y la personalidad, y puede diagnosticarse erróneamente como un problema psiquiátrico, como depresión o trastorno obsesivo-compulsivo. Alternativamente, la persona afectada puede ser vista como egoísta, grosera o inapropiada. Los cambios en el comportamiento pueden ser impulsivos o apáticos. Aproximadamente la mitad de los casos de demencia frontotemporal son de la variedad conductual.
Otros síntomas incluyen:
Otras formas de demencia frontotemporal causan deficiencias en el lenguaje. Los efectos en el lenguaje pueden incluir dificultad para hablar o para comprender. También conocida como “afasia progresiva primaria no fluente”, esta forma de demencia frontotemporal hace que el cerebro tenga dificultades para controlar los músculos necesarios para formar el habla.
La variante semántica afecta la capacidad del paciente para comprender palabras y reconocer rostros y objetos familiares.
La variedad de la demencia frontotemporal depende de qué partes de los lóbulos frontal o temporal se están encogiendo.
La demencia frontotemporal progresa constantemente, con un deterioro significativo en menos de dos años para algunos pacientes y más de 10 años en otros.
Con el tiempo, algunos pacientes con demencia frontotemporal necesitarán atención las 24 horas, ya sea en el hogar o en un entorno especializado.
No existe una cura o medicamento actual para la demencia frontotemporal. Progresa lentamente, pero empeorará con el tiempo. El tratamiento para los síntomas puede incluir:
El centro de recursos del Norton Neuroscience Institute ofrece recursos para ayudar a familias y personas a sobrellevar la demencia frontotemporal.
Parte del objetivo del Norton Neuroscience Institute consiste en atender a la persona en su totalidad, no solo a la afección.
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